En la costa occidental de la isla
Galway no es una ciudad excesivamente grande por lo que se
puede visitar caminando tranquilamente por sus antiguas callejuelas. Algunos de
los lugares que hay que ver en Galway son los que se indican a continuación.
La catedral de Galway
es uno de los lugares de interés a
visitar. Se construyó a mediados del siglo XX, en estilo
neorrenacentista, y destaca más por los elementos de su interior que por los
del exterior: cúpulas, vidrieras, arcos... Justo enfrente se encuentra el
puente Salmon Weir que fue construido en el año 1819 y desde el cual se pueden captar las mejores
vistas del exterior de la catedral con
su gran cúpula.
La iglesia de San Nicolás es la iglesia medieval más antigua de la ciudad. La iglesia se empezó a construir en el 1320 y se dice que en ella Cristóbal Colón rezó antes de partir hacia el Nuevo Mundo.
La plaza Eyre Square es la plaza principal y punto de
reunión tanto de vecinos como de turistas
de la ciudad. Es una plaza llena de vida y de monumentos y es un lugar ideal
para relajarse por sus amplias zonas verdes.
Esta plaza es conocida como John Kennedy Memorial Park debido al
discurso que hizo dicho presidente al
visitar la ciudad.
El castillo de Lynchs, hoy sede de un banco irlandés, es otro de los lugares que hay que visitar.
Fue construido en el siglo XV y destaca por su fachada de piedra.
Una de las calles con más ambiente de la ciudad es Shop
Street. Tiendas, restaurantes, músicos callejeros, antiguos edificios como el
Lynch´s Castle y bonitas librerías es lo que se descubrirá paseando por esta
ambientada calle irlandesa.
Otro lugar destacado de Galway es el Barrio Latino que se encuentra al final de Shop Street. En él pueden apreciarse algunos ejemplos del origen medieval de la ciudad. Esta zona de la ciudad está formada por coloridas calles con un gran ambiente de pubs con música en directo y todo tipo de tiendecitas y restaurantes con un gran encanto. El multicolor barrio Latino comienza en el Spanish Arch, arco doble de piedra que es un vestigio de la antigua muralla y que tenía una función defensiva ya que fueron construidos para proteger los barcos atracados en los muelles que terminan en el Puente de O´Brienss. Es, sin duda alguna, el barrio más pintoresco de la ciudad.
Aunque Galway se puede visitar en un día, es una ciudad ideal para quedarse un par de jornadas ya que, además de sus pubs con buen ambiente donde degustar una fría y estupenda pinta Guinness, posee otros atractivos a su alrededor. Desde esta ciudad se pueden hacer varias escapadas de gran interés. Los acantilados de Moher, la Abadía de Kylemore o las islas de Aran son solo algunos ejemplos de los lugares que debe visitar quien se encuentre en la impresionante costa occidental de la isla de Irlanda.
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