Los destinos más deseados.

Cuatro propuestas variadas.

Estatua de la Libertad.
El verano es la estación elegida por la mayoría de los españoles para los grandes viajes. Es, por motivos obvios, cuando se emprende el gran viaje del año. Un viaje que viene definido, bien por su larga duración, a diferencia de las escapadas por Europa y por territorio nacional que se hacen en fines de semana o puentes, o bien por ser destinos lejanos. Pero, ¿cuáles son los destinos más cotizados entre los españoles? Posiblemente podríamos citar tantos como personas fueran preguntadas al respecto. Nosotros citaremos cuatro que, respondiendo a otras tantas motivaciones, a buen seguro que ocupan un lugar privilegiado en una hipotética lista de destinos más deseados por los turistas españoles.

Si buscamos un destino cosmopolita y urbano, Nueva York es, sin duda alguna, el viaje con que sueñan todos. Multicultural y gran centro del poder financiero, es considerada por la gran mayoría de los ciudadanos como la capital del mundo. No en vano, es sede de las Naciones Unidas. Como grandes iconos turísticos podemos citar la Estatua de la Libertad o el skyline de la isla de Manhattan, en el que ya nos hemos acostumbrado a la ausencia de las Torres Gemelas tras los sucesos acaecidos aquel fatídico 11 de septiembre de 2001. New York City, que es su nombre en inglés, hay que patearla, tanto de día como de noche, para descubrir sus atractivos. El metro, que funciona las veinticuatro horas del día te ayudará para llegar a todos los rincones de la "ciudad que nunca duerme".

Taj Mahal, en Adra, India.
Si lo que buscas es exotismo, quizá India puede ser tu objetivo. La idiosincrasia del pueblo hindú, por muchas razones, puede ser la más contrastada con nuestra cultura occidental. Nueva Delhi, capital del estado, Bombay, la más populosa, Calcuta, inmortalizada por la madre Teresa o Adra, donde encontrarás el Taj Majal, son algunas de las ciudades que no debes perderte en este país asiático. Para moverte por él, el tren allí es mucho más que una mero medio de transporte. Supone toda una experiencia.

Tonos ocres en las dunas del desierto.
La naturaleza en estado salvaje hay que buscarla en África. La diversidad natural de este continente ofrece paisajes y fauna viviendo en su hábitat natural para el agrado de todos los gustos. Los grandes desiertos africanos (Desierto del Sahara, Desierto de Namibia y Desierto de Kalahari) ofrecen su belleza basada en la variedad de ocres que muestran las dunas. Los ecosistemas arboreo-arbustibos de las sabanas se han convertido en uno de los principales espacios para la vida salvaje de innumerables especies animales. El Parque Nacional de Serengueti, en Tanzania, puede ser un buen ejemplo. Pero es la selva de la Cuenca del Río Congo la que muestra su estado más espectacular a través de su explosión vegetal.

La fauna salvaje es uno de los atractivos de África.
Para los amantes de los viajes culturales, la propuesta que les hacemos es mucho más cercana. Roma, en Italia, por diferentes razones puede considerarse como la capital cuyo acervo cultural ofrece mayores atractivos. Por todas sus calles se perciben vestigios de la que fuera cabeza de un gran imperio de la antigüedad. Ello, unido al hecho de albergar en su entorno la sede de una de las grandes religiones monoteístas le ha valido para ser bautizada como "la ciudad eterna".