Las 13 catedrales de Castilla y León.

Monumentos imprescindibles de sus ciudades.

Una Catedral es el lugar en el que asienta su sede o cátedra el Obispo. Por lo tanto, es la iglesia principal de una diócesis. Esa jerarquía se ve reflejada en la monumentalidad que suelen ostentar estos edificios. Por aquello de que los poderes, por mucho que rivalicen, siempre tienden a estar próximos, las catedrales suelen ubicarse en la capital de provincia, pero no siempre ocurre así, pues hay provincias que cuentan con más de una catedral. Esto ocurre, por ejemplo, en Castilla y León, donde, aunque solo tiene nueve provincias, cuenta con las 13 catedrales que se citan a continuación. 


Catedral de Ávila. Es considerada por estudiosos del arte como la primera catedral de estilo gótico levantada en la Península. Está adosada a la famosa muralla de tal modo que el ábside catedralicio se convierte en el exterior en un cubo más de la muralla. Cuenta con una única torre y su discreta fachada parece más pensada en términos defensivos que en un templo religioso. 

Catedral de Astorga. Esta catedral se construyó en estilo gótico, pero con el transcurso de los siglos sufrió numerosas modificaciones por lo que otros estilos, como el barroco, tienen una importante presencia en el edificio. Su fachada principal está flanqueada por dos torres cuadradas siendo esta imagen una de las más características del edificio. 

Catedral de Burgos. Esta catedral es una de las principales catedrales del gótico español. Se construyó en el siglo XIII, aunque con el paso de los siglos ha sufrió numerosas reformas. No obstante, estas han sabido conservar las líneas originales. Su volumen, y especialmente sus dos torres, destacan sobre el entramado urbano que la rodea. 

Catedral de El Burgo de Osma. Se comenzó a construir en el siglo XIV, en estilo gótico. Pero con el tiempo se fueron realizado ampliaciones y añadidos. Los últimos son los que se realizaron en el siglo XVIII en estilo neoclásico. Esta dedicada a la Asunción de la Virgen. Su esbelta torre sobresale sobre el resto de los edificios, siendo la catedral el principal monumento de la ciudad. 

Catedral de Ciudad Rodrigo. La importancia que esta ciudad, situada al este de la provincia de Salamancatuvo en el pasado se ve reflejada entre otras cosas, en su magnífica catedral. Construida entre los siglo XII y XIV ha sufrido, como la propia Ciudad Rodrigo, por aquello de su posición fronteriza, numerosos avatares. Es fácil apreciar en su torre los impactos de los proyectiles que la recibido durante alguna de las contiendas sufridas. 

Catedral de León. La pulcra leonina, que así es como se la conoce. es uno de los templos góticos más relevantes de toda la Península Ibérica. Toda ella es gótica, debido, entre otras cosas, a las acertadas restauraciones que se han realizado en el edificio. De él destacan las amplias vidrieras que llenan de una magnífica luz su interior. 

Catedral de Palencia. La catedral de Palencia es una gran desconocida. Tras su robusta torre y su austera fachada se esconde un templo de grandes dimensiones. Su construcción arrancó en el siglo XIV, pero sobre un templo visigodo anterior. Vestigios de aquel templo es la Cripta de san Valentín, del siglo VIII siendo, además de patrono a la ciudad, quien le da nombre al templo. 

Catedral vieja de Salamanca. La capital charra tiene dos catedrales. La más antigua es románica con importantes elementos góticos, pues se construyó entre el siglo XII y el XIV. De ella destaca en el exterior su bellísima torre del Gallo. Esta catedral estuvo a punto de ser derruida cuando se construyó la nueva. 

Catedral nueva de Salamanca. Fue construida entre los siglos XVI y XVIII. Los estilos imperantes son el gótico tardío, el renacentista y el barroco. Destaca, además de sus grandes dimensiones, la decoración plateresca de sus fachadas. Una decoración que se ha visto enriquecida, tras las últimas restauraciones con la insólita presencia de un astronauta que es afanosamente buscado por los turistas. 

Catedral de Segovia. Su imagen es, junto a las del Alcázar y el Acueducto, uno de los tres iconos universales de la ciudad. Levantada en estilo gótico tardío junto a la Plaza Mayor de la ciudad. Destacan de ella la gran cantidad de pináculos que sobresalen de su cubierta. 

Catedral de Soria. Es la última de todas las castellanoleonesas en adquirir el estatus de catedral, compartiendo obispo con la de Burgo de Osma. Así pues, la Concatedral de San Pedro hasta 1959 era solo una colegiata. Sus orígenes son románicos pero con el tiempo se fueron añadiendo elementos de otros estilos arquitectónicos desfigurando, y casi anulando, sus trazas originales. 

Catedral de Valladolid. El paso de la capitalidad de España por la ciudad de Valladolid provocó que se diseñara una catedral de grandes dimensiones. Un ambicioso proyecto que ha tenido como consecuencia que no se pudiera terminar como estaba pensada. Es un edificio herreriano pues, entre otras razones, fue diseñado por quien dio nombre a esa corriente arquitectónica exclusiva de España: Juan de Herrera.

Catedral de Zamora. Esta catedral se levantó siguiendo las directrices del románico, pero como tantas otras, vio como se hicieron grandes transformaciones. Una de ellas sustituir sus ábsides románicos por una cabecera gótica. En el edificio, uno de los más destacados de la ciudad de Zamora, destaca su cimborrio, cuya cúpula está cubierta con escamas de piedra de aires orientales.

Ubica en el mapa las catedrales de Castilla y León.